Diario "La Capital". Rosario, Miércoles, 14 de noviembre de 2012
Banco Mundial: Argentina duplicó su clase media en los últimos diez años
La clase media registró un importante crecimiento durante la última década en Argentina, a partir de la instrumentación de políticas de desarrollo económico y de la ampliación de oportunidades para los sectores más vulnerables, según un informe dado a conocer ayer en Washington por el Banco Mundial.
Millones de personas en Latinoamérica se incorporaron a los hábitos de consumo masivo.
La clase media registró un importante crecimiento
durante la última década en Argentina, a partir de la instrumentación de
políticas de desarrollo económico y de la ampliación de oportunidades
para los sectores más vulnerables, según un informe dado a conocer ayer
en Washington por el Banco Mundial.
El trabajo, presentado por el presidente de la
entidad, Jim Yong Kim, y el economista jefe para América Latina, Augusto
de la Torre, sostiene que en Argentina el número de habitantes
comprendidos dentro de la clase media aumentó entre 2003 y 2009 de 9,3
millones, hasta 18,6 millones.
Ese aumento de más de 9,3 millones representa un 25
por ciento de la población total de Argentina, el mayor porcentaje de
crecimiento de la clase media en toda la región durante la última
década.
En segundo lugar dentro de la mejora porcentual se
ubicó Brasil, con el 22 por ciento; seguido por Uruguay con el 20 por
ciento; y Colombia, con el 16 por ciento.
"Este fuerte incremento en Argentina está relacionado
con una recuperación de la clase media tras la reducción sufrida por
ésta durante el período 2001/2002, como consecuencia de la crisis
económica", dijo De la Torre.
A nivel regional, el informe denominado "La movilidad
económica y el crecimiento de la clase media en América Latina",
destacó que luego de décadas de estancamiento, la clase media de la
región creció de 103 millones de personas en 2003 a 152 millones en
2009, lo que representa un salto del 50 por ciento.
"Esto representa un cambio estructural histórico",
afirmó el titular de la institución multilateral, quien reconoció que
este resultado se debe a "las políticas implementadas por sus
gobiernos".
"La experiencia reciente en América Latina y el
Caribe le muestra al mundo que se puede brindar prosperidad a millones
de personas a través de políticas que encuentran un equilibrio entre el
crecimiento económico y la ampliación de oportunidades para los más
vulnerables", agregó el presidente del Banco Mundial.
Giro estructural. Durante décadas,
la reducción de la pobreza y el crecimiento de la clase media en América
Latina y el Caribe avanzaba a un ritmo muy lento, a medida que el bajo
crecimiento y la persistente desigualdad frenaban el progreso.
En los últimos diez años, sin embargo, la suerte de
la región mejoró significativamente gracias a ciertos cambios de
políticas públicas que enfatizaron la prestación de programas sociales
junto a la estabilidad económica.
El resultado fue que la clase media creció un 50 por
ciento hasta abarcar el 30 por ciento de la población total de la región
en 2009.
De esta forma, en la región la clase media y los
pobres representan aproximadamente la misma proporción de la población
total, de acuerdo al informe.
Algunos de los factores más importantes a la hora de
favorecer la movilidad ascendente en América Latina incluyen un mayor
nivel educativo entre los trabajadores, mayor nivel de empleo formal,
más personas viviendo en áreas urbanas, más mujeres en la fuerza laboral
y familias más pequeñas.
El informe define a los integrantes de la clase media
como aquellos con un ingreso per cápita de entre 10 dólares y 50
dólares por día.
Este nivel de ingreso proporciona una mayor capacidad
de recuperación ante eventos inesperados, y refleja una menor
probabilidad de volver a caer en la pobreza.
No obstante, el documento describe a su vez una
cuarta clase vulnerable, que representa el 38 por ciento de la
población, y a la cual le fue mucho mejor que a los pobres en términos
de ingreso pero aún carecen de la seguridad económica de la clase media.
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
Diario "La Capital". Rosario, Miércoles, 14 de noviembre de 2012
Latinoamérica, entre el cambio estructural y viejos retos
A pesar del aumento en el gasto social de los gobiernos en la última década y de los exitosos programas de transferencias de recursos, no todos los habitantes de la región sacaron un boleto a la clase media. Muchos pobres siguen siendo pobres, y un poco más de la mitad de esa franja logró una movilidad sólo a la clase vulnerable.
A pesar del aumento en el gasto social de los
gobiernos en la última década y de los exitosos programas de
transferencias de recursos, no todos los habitantes de la región sacaron
un boleto a la clase media. Muchos pobres siguen siendo pobres, y un
poco más de la mitad de esa franja logró una movilidad sólo a la clase
vulnerable.
Aunque la desigualdad se redujo en los últimos años,
aún las disparidades reinan en la región, donde conviven sectores
miserables con magnates como el mexicano Carlos Slim , el hombre más
rico del mundo.
En Latinoamérica, a diferencia de otras regiones más
desarrolladas, todavía el nivel de ingresos y de educación de los padres
influye mucho en el futuro de los hijos y en su posibilidad de ganar
terreno en la escala social.
Sobre todo en Brasil, Ecuador, Panamá y Perú.
"Lamentablemente, a pesar del movimiento ascendente
de los ingresos a lo largo de la vida de una generación, la movilidad
intergeneracional sigue siendo limitada en América Latina", asegura el
estudio elaborado por el Banco Mundial.
Con la nueva realidad social latinoamericana, los gobiernos de las región tendrán nuevos desafíos, apunta el trabajo.
Uno de ellos es incorporar en las políticas públicas
la certidumbre de que esforzarse y cumplir con los deberes en la
sociedad son recompensados , y garantizar que haya igualdad de
oportunidades para todos, desde la educación hasta el acceso al empleo.
Otro reto es lanzar una segunda generación de reformas al sistema de
seguridad social para superar la fragmentación y que el esquema no esté
tan cargado en las espaldas de la clase media.
Latinoamérica además tiene que romper con la dinámica
de impuestos bajos y servicios públicos de mala calidad, que lleva a
las clases medias y altas a optar por enviar a sus hijos a escuelas
privadas, a contratar seguridad privada y a recurrir a hospitales
privados.
"La región no puede contar con que el entorno externo
seguirá siendo tan favorable como en el pasado reciente para alcanzar
más beneficios sociales y económicos", dijo el banco.
"Al final, la responsabilidad recaerá
fundamentalmente sobre los hombros de los dirigentes políticos y las
instituciones democráticas de la región, que se enfrentan al desafío de
replantear su contrato social", concluyó el trabajo elaborado por la
entidad con sede en Washington.
No hay comentarios:
Publicar un comentario